Las camillas eléctricas, por su versatilidad, son útiles en muchas de las actividades en las que se precisa una camilla. Por una parte, permiten situar la camilla a la altura más adecuada con facilidad gracias a la precisión de sus motores eléctricos. Por otra parte, gracias a las articulaciones que unen los distintos segmentos o cuerpos en que se divide la camilla y a los motores que mueven cada uno, puede configurarse la forma de la misma.